Y se fue…se esfumó en un segundo
la sonrisa que pintabas en mi cara. Desapareció en el mismo instante que dejé
de jugar y todo se comenzó a complicar. Ese cuadro que pintabas ya no tenía
sentido, ya no me representaba. Había perdido toda su esencia y lo mejor era
que desapareciera de nuestras vidas. Al igual que desaparecerán todos los
momentos que pasamos juntos y los recuerdos quedarán en el tintero.
¿Nos volveremos a ver? No lo se,
ni lo quiero saber…Todo es mejor así, tú por tu camino y yo por el mío. ¿Y si,
por alguna casualidad el destino nos volviera a juntar? Pues ya veremos que
ocurre, mientras tanto, hagamos que nuestras vidas sean felices por separado.
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